Consideremos el asunto: uno nace, llora, se alimenta, evacúa, crece, a
los cinco o seis años empieza la escuela y estudia lo que otros eligieron que
aprenda, sigue creciendo, se vuelve adolescente, rock & roll, explotan las glándulas pero
nadie le explica el cómo, sólo “lo que NO”, se sigue creciendo entre tecnología
asfixiante y millones de dudas, entre medios de descomunicación despiadados, con férreos códigos
morales arbitrarios, se lee, se acaba la escuela y ya uno es un boludo de manual, se llega a
la mayoría de edad, se descubren el alcohol y las drogas, o tal vez se descubran mucho antes
de la mayoría de edad, uno intenta moverse de esa boludez impuesta pero por ahí un día deja embarazada a la novia y a los veintitrés
años se encuentra en el espejo con la imagen de un crío que chilla lleno de
verdes mocos y una mujer insatisfecha... uno trabaja, también, en una fábrica
apretando tuercas o manejando un taxi o cagando a la gente, hay muchos trabajos
de cagar a la gente, por ejemplo la policía, los abogados, los curas, los
vendedores de autos, los comerciantes, los milicos, los políticos, los jueces y los
carceleros y los maestros de escuela y los médicos, que son como los curas del
siglo XXI.
Y un día uno lee y… ¿qué lee?... lo siguiente:
“Consideremos el asunto: uno nace”
Entonces, y sólo entonces, uno se da cuenta de que ni siquiera se
explica el hecho de haber nacido… ¿porqué nacimos?... menos aún se explica todo el pandemonio posterior.
Ni hablar de la muerte y de lo que hay más allá… si hay.
En este contexto sucedió, también, Bahía Blanca: dos noches.
Un recuerdo bello, helado de invierno, con centenares de cuadras
recorridas a pié, millones de estrellas y el amor muy cerca… tan cerca como la inexplicabilidad de
todas las cosas.
Cenas en Bamboo a nivel reviente, besos, hotel, puerto, grato descubrimiento
de la trágica y entrañable colmena humana.
Luego regresamos al silencio de Villa Ventana, pero ahí también era
esto que también me pasa hoy, “la vida”, y tampoco encontramos allí –ni encontraremos aquí- la explicación.