El hotel, las flores, los amigos perros, el frío, las montañas, la nieve, el cura Brochero en su gesto "Vade Retro", el cielo entre las aguas y las aguas entre los cielos... el pequeño y gran mundo Mina Clavero, luna de miel, la estrella girando imparable en lo alto, el mate amargo, los besos, las estrellas, la cena clavada a las 20:30, el desayuno en la mañana, las largas caminatas y los ríos infinitos, la luz, la tierra, la fe, el amor...
El mundo Mina Clavero, esa instancia entre una extensa serie de instancias en la vida, inolvidable instancia y, también, irrecuperable.
Como todo, irrecuperable, entrañable y dichosamente melancólico.
Todo: un instante presente.
