domingo, 8 de septiembre de 2013

Desolación interior

¿Cómo se vería un alma olvidada, un alma sin luz, sin alimentos, apagada y detenida, sin tiempo y sin movimiento hacia algún objetivo?
¿Como se podría iluminar esa desolación interior?
La imagen evoca miedo... y tortura.
Una lámpara sola por siempre encendida, soledad húmeda, ecos, cemento, color y encierro, hierros y columnas.
Una dependencia policial en la lejana San Martín.
Gente trabaja allí. Esa gente nos vigila, nos corrige y cataloga y nos elige para ejemplificar-nos.
Esa gente, poderosa e indigna, trabaja allí.
¿Su trabajo?
Electricidad y esposas.
El horror, dice Kurtz -lo está diciendo ahora-... el horror.